ZABALTEGI-TABAKALERA
A lo largo de la historia del Cine hay muchas películas que tienen
argumentos con la televisión como personaje, como algo casi siempre
maligno que afecta a los protagonistas, donde vemos el efecto que en
ellos produce estar ante ese electrodoméstico, o también como
metáfora clara de lo que son sus vidas. Con la llegada del vídeo
doméstico y el VHS hacia finales de los setenta y sobre todo en la
década de los ochenta, ese tipo de historias aumentó. Se acuerda
uno de Poltergeist (1982), de la obra maestra Videodrome (1983), de
Terrorvision (1986), Permanezca en sintonía (1992), Pleasantville
(1998), o de la más reciente Rent-a-pal (2020)... Todas estas
películas, como se puede observar, se enmarcan dentro del género, más o menos
explícito, del fantástico y el terror (las hay de otros géneros, claro). La nueva película de Jane
Schoenbrun, I saw the tv glow, va también por esos derroteros,
aunque a su manera.