Poder ser. Poder hacer. Poder. Todo lo
que esa palabra conlleva ha sido el leit motiv de la edición 25 de
dFeria, el festival de artes escénicas de Donostia-San Sebastián,
reflejándose en su cartel y siendo representado por la pierna de una
bailarina en alto, quizá gritando, seguro en movimiento. También el
poder, de una forma o de otra, se ha visto en muchas de las
propuestas escénicas de este año en la feria. Una gran variedad de
disciplinas artísticas se han podido ver y disfrutar, y de algunas
de ellas hablaré en este artículo y algunos más. No he podido ver
todo lo que quisiera, claro, pero lo que he tenido oportunidad de ver, en su gran mayoría, me
ha dejado bastante satisfecho.
Comienzo el repaso a lo que he visto, con los
espectáculos de danza: