Happythankyoumoreplease (Josh Radnor)
Premio del público en Sundance. Eso es lo que hace catalogar a esta película como Perla en San Sebastián. La dirige Josh Radnor, muy conocido por aparecer en la serie de televisión Cómo conocí a vuestra madre. Y la verdad es que creo que le viene grande el nuevo juguete que le han proporcionado, este para hacer películas.
La película cuenta las tres historias diferentes de un grupo de amigos neoyorquinos: un escritor (Josh Radnor) que no logra que publiquen su trabajo y que entabla amistad con un niño negro (hasta el punto de dejarlo vivir en su casa), una chica cuyo novio llega de Los Ángeles de hacer un negocio y le propone irse allí a vivir (con las consecuentes dudas de ella) y una tercera chica sin pelo, alopécica (Malin Akerman - Watchmen), que no se acaba de ver a gusto consigo misma ni con las relaciones que tiene.
Esas son las historias principales, en principio independientes unas de otras, que se irán desarrollando a lo largo de la película. De vez en cuando los amigos se reúnen y hablan de sus propias historias, para poyarse, para criticarse, o para lo que toque en cada ocasión. Pero como digo, se pueden separar en tres historias diferentes sin ningún problema. Y considero que precisamente eso es un lastre para el film. El guión, escrito por el propio Radnor, es sencillo a más no poder, jugando en su contra. La historia del escritor con el niño podría recordar a Un papá genial (auquella con Adam Sandler), siendo una sucesión de secuencias que no llegan a ningún lado, alargando todo innecesariamente.
Por otro lado, la historia de los dos novios que dudan si ir a vivir a Los Ángeles o quedarse en Nueva York, pretende asemejarse a una película de Woody Allen, con discusiones de pareja, sobre parejas, de arte y cultura, paseos por el parque, etc. Elementos que siempre se ven en las películas de Allen, pero sin el estilo y la gracia que casi siempre le pone éste. Curiosamente, uno de los diálogos que tiene la pareja al llegar del cine a casa, es sobre Woody Allen, que aunque no lo mencionan está claro que han visto una película suya (hablan de una película anual, de que siempre es lo mismo, de que ya no es lo que era…). Por lo tanto los parecidos entre esta parte de la película y un trabajo de Woody Allen no son casuales. Pero aun así, no llegan a la altura.
Por último, quizá la historia más interesante de las tres: la de la chica sin pelo, interpretada por Malin Akerman, ya que ella sí que sabe darle cierta personalidad a su personaje y se acaba empatizando con ella en cierto modo, por sus indecisiones, o por sus fracasos sentimentales. Es, además, la historia más optimista (en su resolución), pero eso sí, no deja de ser otro manual de autoayuda, concluyendo lo siguiente: hay que ser feliz tal como se está, aceptándose a uno mismo, la belleza está en el interior y bla, bla, bla… aunque a veces, sólo a veces, también esté en el exterior. Y si resulta que tienes dificultades para aceptarte tal cual eres: llama a tus amigos, que siempre estarán para apoyarte.
Esperaba un guión más elaborado, una mejor dirección, algo más entretenido… pero es una película casi vacía, con historias sin apenas personalidad y que, camuflándose en el premio obtenido en Sundance y la etiqueta indie (por cierto, da la impresión de que cualquier película independiente de hoy en día que se precie tiene que incluir en su banda sonora, como mínimo, un tema del grupo Jaymay), uno se encuentra en el fondo algo totalmente comercial. Una floja mezcla de la serie Friends, la propia Cómo conocí a vuestra madre, y Woody Allen.
Un 3.
PD: Con esta película me he acordado de Edward Burns y su buen comienzo con Los hermanos McMullen. El nuevo Woody Allen, le llamaron… Después hizo Ella es única, y ahí, según mi opinión, empezó su caída en picado.
La película cuenta las tres historias diferentes de un grupo de amigos neoyorquinos: un escritor (Josh Radnor) que no logra que publiquen su trabajo y que entabla amistad con un niño negro (hasta el punto de dejarlo vivir en su casa), una chica cuyo novio llega de Los Ángeles de hacer un negocio y le propone irse allí a vivir (con las consecuentes dudas de ella) y una tercera chica sin pelo, alopécica (Malin Akerman - Watchmen), que no se acaba de ver a gusto consigo misma ni con las relaciones que tiene.
Esas son las historias principales, en principio independientes unas de otras, que se irán desarrollando a lo largo de la película. De vez en cuando los amigos se reúnen y hablan de sus propias historias, para poyarse, para criticarse, o para lo que toque en cada ocasión. Pero como digo, se pueden separar en tres historias diferentes sin ningún problema. Y considero que precisamente eso es un lastre para el film. El guión, escrito por el propio Radnor, es sencillo a más no poder, jugando en su contra. La historia del escritor con el niño podría recordar a Un papá genial (auquella con Adam Sandler), siendo una sucesión de secuencias que no llegan a ningún lado, alargando todo innecesariamente.
Por otro lado, la historia de los dos novios que dudan si ir a vivir a Los Ángeles o quedarse en Nueva York, pretende asemejarse a una película de Woody Allen, con discusiones de pareja, sobre parejas, de arte y cultura, paseos por el parque, etc. Elementos que siempre se ven en las películas de Allen, pero sin el estilo y la gracia que casi siempre le pone éste. Curiosamente, uno de los diálogos que tiene la pareja al llegar del cine a casa, es sobre Woody Allen, que aunque no lo mencionan está claro que han visto una película suya (hablan de una película anual, de que siempre es lo mismo, de que ya no es lo que era…). Por lo tanto los parecidos entre esta parte de la película y un trabajo de Woody Allen no son casuales. Pero aun así, no llegan a la altura.
Por último, quizá la historia más interesante de las tres: la de la chica sin pelo, interpretada por Malin Akerman, ya que ella sí que sabe darle cierta personalidad a su personaje y se acaba empatizando con ella en cierto modo, por sus indecisiones, o por sus fracasos sentimentales. Es, además, la historia más optimista (en su resolución), pero eso sí, no deja de ser otro manual de autoayuda, concluyendo lo siguiente: hay que ser feliz tal como se está, aceptándose a uno mismo, la belleza está en el interior y bla, bla, bla… aunque a veces, sólo a veces, también esté en el exterior. Y si resulta que tienes dificultades para aceptarte tal cual eres: llama a tus amigos, que siempre estarán para apoyarte.
Esperaba un guión más elaborado, una mejor dirección, algo más entretenido… pero es una película casi vacía, con historias sin apenas personalidad y que, camuflándose en el premio obtenido en Sundance y la etiqueta indie (por cierto, da la impresión de que cualquier película independiente de hoy en día que se precie tiene que incluir en su banda sonora, como mínimo, un tema del grupo Jaymay), uno se encuentra en el fondo algo totalmente comercial. Una floja mezcla de la serie Friends, la propia Cómo conocí a vuestra madre, y Woody Allen.
Un 3.
PD: Con esta película me he acordado de Edward Burns y su buen comienzo con Los hermanos McMullen. El nuevo Woody Allen, le llamaron… Después hizo Ella es única, y ahí, según mi opinión, empezó su caída en picado.
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