20 de febrero de 2012

Mis actores del 2011

Han pasado ya casi dos meses de este año 2012, y aún no había comentado por aquí qué personas o películas fueron mis favoritas del año pasado. Empiezo pues, la serie que lo indica, con una diferencia respecto a los posts similares de años anteriores: esta vez pondré diez elegidos en cada categoría, en lugar de cinco. Será por este orden: actores, actrices, directores, y películas.

Vamos pues, con ellos (sin orden de preferencia alguno).

MEJORES ACTORES DEL 2011

José Coronado por No habrá paz para los malvados


Recién ganado el Goya al mejor actor español de 2011, por fin ha llegado su momento. El momento de que se reconozca que José Coronado es un gran actor. Su personaje de Santos Trinidad en No habrá paz para los malvados es un prodigio dentro del cine español. Parece mentira que alguien tan ruin, tan desgraciado, tan hijo de puta, consiga meterse al personal en el bolsillo (algo parecido, si no idéntico, a lo que ocurrió con Luis Tosar y su Malamadre de Celda 211). Inolvidable personaje que queda en la memoria del espectador durante mucho tiempo.

John C. Reilly por Un dios salvaje


Si bien es verdad que todavía no le ha llegado el momento de ser reconocido a nivel global por el gran público, este actor de gran carisma que lo mismo te puede hacer una comedia idiota (Hermanos por pelotas), un drama (Magnolia) o un musical (Chicago, por la que fue nominado al Oscar) está al nivel de sus tres grandes compañeros en Un dios salvaje de Roman Polanski. Los cambios de registro de su personaje son magníficos y el espectador ve cómo alguien afable en principio, poco a poco y de la manera más tonta puede convertirse en alguien que pierde completamente los papeles frente a los demás. Bravo por él porque uno no se da ni cuenta de cuándo ocurre, pero John C. Reilly lo logra.

Christoph Waltz por Un dios salvaje


Ocurre lo mismo que con John C. Reilly y sus compañeras en Un dios salvaje: Waltz está a un nivel muy alto sin lugar a dudas, cosa que ya sabíamos (especialmente desde haberlo visto/descubierto en Malditos bastardos de Quentin Tarantino). Su apático personaje logra no pocos momentos en los que las situaciones en la película se vuelven hilarantes y el aplomo y la pose del actor ante todo lo que ocurre  son simplemente fantásticos.

Christian Bale por The fighter


Christian Bale logró el Oscar al mejor actor de reparto con esta interpretación. Una vez más el actor se transformó para ser un personaje de esos en los que nos gusta tanto verle: en los huesos, al límite y provocando emociones de diversa índole en el espectador. Una de las mejores interpretaciones de la carrera de este camaleónico actor.

Jean Dujardin por The artist


Qué decir de este actor francés que no se haya dicho ya en los últimos meses... Su interpretación de un actor de la época del cine mudo en The artist es apabullante. Con el premio al mejor actor en el Festival de Cannes 2011, muchos han criticado que lo único que hace es copiar gestos de actores de aquella época, y que eso no vale. Mal hecho, porque precisamente por eso deberían alabarle, tener en cuenta y aceptar que es una de las mejores actuaciones de los últimos años por derecho propio. ¡No hay que negarse a la evidencia!

Jeff Bridges por Valor de ley


Cierto es que la sombra de John Wayne interpretando el mismo personaje en la película del mismo título de Henry Hathaway (y que le valió su único Oscar) es muy alargada... pero Bridges construye un personaje único, con el mérito de lograr que te olvides de Wayne y lo veas a él. Ya sólo por eso merece ser considerado como uno de los mejores del 2011 y no podía faltar aquí.

Viggo Mortensen por Un método peligroso


Un personaje complicado, sin duda, el de Sigmund Freud... Pero Mortensen sabe lo que tiene entre manos y lo lleva a buen puerto, como tantas veces hace con sus personajes.  Aunque quizá su personaje se queda algo corto en la película de David Cronenberg, los matices que en él vemos consiguen hacer más cercano a un personaje tan mítico como el padre del psicoanálisis, con su chulería, su arrogancia, incluso algún que otro miedo (que no se dice en la película pero que él muestra muy bien, tan sólo con un gesto o una mirada).

Michael Fassbender por X-Men (Primera generación)


Ha sido el año de Fassbender, que aunque no ha logrado una esperada nominación al Oscar por Shame (sí logró en septiembre la Copa Volpi al mejor actor en Venecia): Le hemos visto en Un método peligroso y en Jane Eyre (grandes interpretaciones en todas ellas),  además de la película por la que lo menciono: X-Men Primera generación. ¿Por qué le "nomino" por esta película? Simplemente porque se comía con patatas a todos sus compañeros de reparto (sin excepción), con lo cual poco más hay que añadir al gran trabajo que siempre hace este actor.

Gary Oldman por El topo


El topo, más que una película complicada, es compleja. Tiene muchos entresijos y muchos nombres, entre los que es fácil perderse si no se está atento. Pero es sobre todo una película de personajes, y entre todos ellos destaca el interpretado por Gary Oldman de forma tan buena. Alguien reservado, callado, observador... y con muchos más toques que Oldman aporta que hace imposible que el espectador no disfrute con ellos. Una vez más el actor realiza una gran interpretación que además se ha visto recompensada con una nominación al Oscar, la primera de toda su filmografía (parece mentira que así sea pero esperemos que no sea la última).

Reparto masculino de Nader y Simin, una separación


En el Festival de Berlín hubo una película que triunfó por todo lo alto, y fue Nader y Simin, una separación. Entre los premios obtenidos estaba incluido el que reconocía a todo el reparto masculino de la película. Un premio totalmente acertado porque todos están realmente bien, aportando una credibilidad bestial a sus personajes, comprendiendo sus modos de actuar ante las circunstancias que tenían frente a ellos y con mucha sensiblidad en todos los sentidos. Un gran trabajo por parte de todos ellos que merece la pena, y mucho, valorar y disfrutar.

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