Ingredientes:
- Magret de pato
- 1 brik de nata líquida para cocinar
- Queso roquefort
- Sal
Elaboración:
La elaboración de este plato es extremadamente sencilla. Inicialmente se cocinará el magret. Para ello, se realizarán unos cortes en la parte con grasa de la carne. Dichos cortes serán a lo largo y a lo ancho, y sin rozar la carne, sólo es para abrir la grasa para que la carne "respire" a la hora de cocinarse.
Se coloca el magret en una sartén amplia (preferiblemente sobre una plancha) sobre la parte de la grasa y sin añadir nada de aceite, de forma que según se vaya calentando, vaya soltando todo el aceite grasiento. Con calma. Cuando ya esté dorado, se le da la vuelta y se espera un buen rato a que se haga esa parte de la carne. De forma sucesiva se irá dando vuelta y vuelta a la carne hasta que quede al gusto (más sangrante, más hecha...). Entre unos 10 y 15 minutos, pero lo dicho, según el gusto.
Se aparta de la sartén o plancha y se procede a trocear la carne: Queda muy elegante trocearlo a lo ancho, en pequeños trozos, colocándolos después en una fuente y sazonando (la sal gorda les viene bien), preparados para ser rociados por la salsa de roquefort.
Salsa de roquefort: Mientras poco a poco va cogiendo color el magret, se puede comenzar a preparar la salsa de acompañamiento (sin perder de vista la carne). En lugar de roquefort, se puede usar queso azul, que es menos fuerte que el roquefort y también más barato.
Se vierte el brik pequeño de nata líquida sobre una sartén y se deja que se caliente. Cuando se observe que ya está caliente y sin que espese (en aproximadamente un par de minutos) se procede a echar sobre la nata trozos de roquefort, moviendo la mezcla para que éste se vaya fundiendo poco a poco. Una vez el queso está fundido al gusto (con tropezones o completamente fundido), finalmente se vierte la salsa sobre el magret, sin dejar que cubra todo por completo para que el contraste entre el blanco de la salsa y el rojo de la carne sea más visible. Si se desea, se puede espolvorear con un poco de perejil, un poco de verde también le da cierta alegría.
Servir. Gozar. Ser feliz.
Bebida para acompañar: Un buen vino tinto.
Tiempo de elaboración: Unos 15 minutos.
Dificultad: La única dificultad posible es que no se haga la carne más de la cuenta.
Precio: 10 € aprox.
- Magret: 6 € aprox.
- Queso: 2-4 € (dependiendo de si es azul o roquefort)
- Nata líquida: 0'50 € aprox. (brik pequeño corriente)
On egin!
¡Que aproveche!
Se coloca el magret en una sartén amplia (preferiblemente sobre una plancha) sobre la parte de la grasa y sin añadir nada de aceite, de forma que según se vaya calentando, vaya soltando todo el aceite grasiento. Con calma. Cuando ya esté dorado, se le da la vuelta y se espera un buen rato a que se haga esa parte de la carne. De forma sucesiva se irá dando vuelta y vuelta a la carne hasta que quede al gusto (más sangrante, más hecha...). Entre unos 10 y 15 minutos, pero lo dicho, según el gusto.
Se aparta de la sartén o plancha y se procede a trocear la carne: Queda muy elegante trocearlo a lo ancho, en pequeños trozos, colocándolos después en una fuente y sazonando (la sal gorda les viene bien), preparados para ser rociados por la salsa de roquefort.
Salsa de roquefort: Mientras poco a poco va cogiendo color el magret, se puede comenzar a preparar la salsa de acompañamiento (sin perder de vista la carne). En lugar de roquefort, se puede usar queso azul, que es menos fuerte que el roquefort y también más barato.
Se vierte el brik pequeño de nata líquida sobre una sartén y se deja que se caliente. Cuando se observe que ya está caliente y sin que espese (en aproximadamente un par de minutos) se procede a echar sobre la nata trozos de roquefort, moviendo la mezcla para que éste se vaya fundiendo poco a poco. Una vez el queso está fundido al gusto (con tropezones o completamente fundido), finalmente se vierte la salsa sobre el magret, sin dejar que cubra todo por completo para que el contraste entre el blanco de la salsa y el rojo de la carne sea más visible. Si se desea, se puede espolvorear con un poco de perejil, un poco de verde también le da cierta alegría.
Servir. Gozar. Ser feliz.
Bebida para acompañar: Un buen vino tinto.
Tiempo de elaboración: Unos 15 minutos.
Dificultad: La única dificultad posible es que no se haga la carne más de la cuenta.
Precio: 10 € aprox.
- Magret: 6 € aprox.
- Queso: 2-4 € (dependiendo de si es azul o roquefort)
- Nata líquida: 0'50 € aprox. (brik pequeño corriente)
On egin!
¡Que aproveche!
¡Rico rico y con fundamento!
ResponderEliminarCon ésto de la crisis se agradecen sugerencias tan apetitosas y económicas cómo ésta. Sobre todo en éstas fechas con las Navidades practicamente encima. Además, cuando nos pregunten el menú elegido, con lo sofisticado y elegante que suena éso de: 'magret de pato con salsa de roquefort', vámos a ser la envidia de la suegra, la cuñada, la vecina del quinto..., me voy ya mismo a la nevera, éso me pasa por clickar la imagen sin tener en cuenta la advertencia...
ResponderEliminarEste blog es una caja de sorpresas, créo debe ser el más variado en contenido, de toda la blogosfera...
...¿qué que hago aquí a éstas horas?, culturizarme un rato mientras espero a que mi consorte termine de visualizar por vigesimoquinta vez "El señor de los anillos", que están emitiendo en no-se-que-canal..., yo créo que ya se conoce el guión. Me voy ya que comienza a preocuparme éste hombre, me ha parecido oirle decir algo tal que: "míoooo, el mando de la tele es míoooo..."
ResponderEliminarEsto ya es para hacerselo mirar ¿no?
Me sacas los colores, Ouiser! Sagerá... el más variado, jaja, no creo yo, pero gracias!
ResponderEliminarMe ha gustado lo de "consorte" ;-p Con lo buena que es esa peli déjale, pobrecillo! Merece la pena jejeje