Es por todo eso que este año el Festival de Sitges ha querido homenajearle con el premio Máquina del Temps, y además ha programado sus dos últimas películas, pudiendo considerar su visionado como una sesión doble: Get away (Steffen Haars) y Krazy House (Steffen Haars y Flip Van der Kuil). Y por si fuera poco, también se organizó dentro del festival una charla con el actor (a la que había que inscribirse previo pago -1 euro- y tener en cuenta que sería sin traducción simultánea... Lo cual es un hándicap, a ver si tienen en cuenta que aunque a veces la traducción ralentice el sistema de charlas, es bastante necesario muchas veces).
De todo ello voy a procurar dar cuenta en este artículo a continuación...
Charla con Nick Frost
Es solamente un pequeño extracto de la charla que dio, pero da una idea de cómo es este tío tan afable que nos contó que ha tenido y tiene mucha ansiedad y que no lleva demasiado bien el tema de las multitudes... Pero aparte de eso, también habló del cine de animación (ha doblado muchos personajes animados) y de muchas más cosas.
Premio Máquina del Temps
Fue en la presentación en el Auditori de la película Get Away donde se aprovechó para entregar el premio honorífico a Frost. Aquí puedes ver la entrega con su discurso completo:
Y por último, unos omentarios sobre las dos películas que tenían a Frost como protagonista en el Festival
Get Away (Steffen Haars)
Se trata de una película que se ríe del subgénero "folk horror", parodiando muchas de las cosas que se ven en ese tipo de películas. No sólo por esos personajes tan extraños y turbios que pueblan la isla, siendo una clara parodia de esa turbiedad que siempre se muestra, sino por cierto giro que sucede llegado un punto en la película. El problema es que ese giro llega, quizá, algo tarde. Y luego, además, cuando llega, aún queda bastante tiempo para que se acabe la película y acaba alargándose, habiendo perdido buena parte de la gracia tras esa sorpresa.
Quitando, por tanto, que sea una parodia del "folk horror", la película termina siendo algo olvidable y es una pena, porque aunque tiene ciertos toques gore, tampoco llegan a ser suficientes. Ya que te pones a mostrar mucha sangre y violencia, ¿por qué no lo das todo?
Krazy house (Steffen Haars y Flip Van der Kuil)
Lo bueno llega cuando aparece un trío de personajes tremendos: Unos rusos que desde el principio se ve que no tienen buenas intenciones con nada de lo que hay en la casa. Así que la lían parda en todos los sentidos. Todo ello con el formato de telecomedia televisiva de los noventa... A excepción de ciertos flashes que le vienen al padre, donde el formato cambia y se pone más cinematográfico, y más violento también. Pero todo eso son, como digo, flashes, y tendrán su culminación bastante más adelante en la película...
La película refleja bien cómo era el consumo televisivo de aquella época (y no sólo el consumo televisivo, también el de muchas otras cosas y sustancias) y también las creencias de "los viejos" que ya no tienen cabida en los jóvenes (fórmula que sirve para el conflicto en el argumento de la teleserie), pero en realidad ese tipo de cosas, a un aficionado al género y tras ver lo bien hecho que está el formato, le aburren rápido. Lo que se quiere ver es sangre, burradas y a ser posible mucho gore. Todo elllo acaba llegando, hay incluso cabezas reventadas por escopetazos, pero como pasaba en Get Away, lo bueno tarda en llegar y luego se alarga...
Tiene puntos bastante divertidos y algún que otro giro de guion muy loco que a según qué gente le sacará de quicio, pero son esos trozos precisamente los mejores de toda la película. Al final es todo demasiado caótico y tarda demasiado en finalizar, dando la impresión de que no sabían cómo terminar el guion. Aun así, se puede ver para echar unas risas.
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